lunes, septiembre 27, 2004

Sueña

Sueña y no dejes de soñar. Sueña lo que quieras y ten fe de que algún dí­a se hará realidad. Sueña sin miedo y sin lí­mites que esa es la felicidad de soñar, ya que puedes imaginar lo que desees sin la necesidad de que sea realidad.

No dejes que nadie se burle de tus sueños o te diga que es malo soñar. Esa persona por dentro está muerta ya que los sueños te alimentan y te dan ganas de vivir cada dí­a más. Eso sí­, el único consejo que os doy es que sueñes con los pies en la tierra y no te quedes sólo en el soñar, sino que busques los medios y las maneras de convertir ese sueño en realidad.

Ponle fe, ponle empeño, no te olvides de las ganas y de la tenacidad. Sólo así­, algún dí­a podrás decir: "Ahora mi sueño es realidad".

1 comentario:

Joseph Seewool dijo...

Lúcida idea, que comparto. Hay que vivir, realizar los sueños, y tambien que éstos sean una prolongación de la vida diurna. Sueño y vigilia deben dialogar entre sí.